Aunque hacer un simpa no se ha convertido todavía en una práctica habitual en nuestro país, lo cierto es que cada día muchos hosteleros deben hacerse cargo de la incívica determinación que toman algunos clientes de marcharse del establecimiento antes de pagar. 

Sin embargo, hay ocasiones en las que, tal y como ha señalado recientemente la cuenta especializada de @SoyCamarero, son los propios empleados quienes terminan pagando los platos rotos. 

"Hacer un simpa es hacer daño a la empresa y, en muchos casos, como vemos, a los mismos trabajadores", ha explicado el perfil de Jesús Soriano a través de X (Twitter) en un post que pretende concienciar acerca del coste que tienen los simpas para los empleados. 

Y es que el dueño de un bar mandó un mensaje a los camareros de su establecimiento por motivo de una cuenta de 22 euros que un cliente no pagó. "Chicos, esta mesa que está abierta se paga con el bote", comunicaba el hostelero, tal y como se puede ver en la captura de pantalla, publicada por el perfil de @Soy Camarero.

De esta forma, el dueño del local anunciaba que la deuda correspondiente a los simpas se liquidarán con el bote que acumulan los camareros con las propinas. "Ayer faltaron 27 euros y también se han sacado del bote", informaba el hostelero, a la vez que advertía a sus empleados: "Hay que prestar más atención, ya que la siguiente vez la mesa la pagará el responsable de la zona de la mesa abierta. Para que después no pregunten por qué el bote no sube de 60 euros".

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Justificación legal

A pesar de que, según el artículo 58.3 del Estatuto de los Trabajadores, un hostelero no puede imponer como castigo "la reducción de la duración de las vacaciones u otra minoración de los derechos al descanso del trabajador o multa de haber" -ya sea, por ejemplo, una reducción de sueldo-, algunos dueños se aprovechan del convenio a través del denominado "quebranto de moneda". 

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Se trata de un plus en la nómina que reciben los empleados por el que, a cambio, se les puede llegar a hacer responsables del descuadre negativo de la caja, en caso necesario.